José de Arimatea Moyao, es sin duda, uno de los arquitectos contemporáneos más significativos para el México actual, con sus obras se inaugura una nueva época para la vida cultural de las ciudades. Encuentra aquí cuatro proyectos de Moyao Arquitectos, su estudio de arquitectura, y descubre por qué son hitos urbanos.
Si bien la firma de Moyao se suele encontrar en proyectos de gran envergadura: estadios, auditorios, teatros, centros culturales y centros comerciales, entre otros, en los que predomina su talento para resolver el flujo de una gran afluencia y brindar soluciones para espacios de funciones múltiples, uno de los aspectos más característicos de sus proyectos es el impacto de estos en la vida cultural de estilo urbano. Así es que sus obras forman necesariamente parte de la historia por tres razones: el rescate de inmuebles históricos y culturalmente significativos, la creación de nuevos espacios para la vida social urbana y la capacidad de sus obras para convertirse en hitos urbanos, te contamos más sobre algunos de ellos.
1. Gicsa, Puebla
Esta obra también conocida como Explanada de Puebla, es un formato de plaza comercial con una explanada para realizar espectáculos, entre los que se puede considerar incluso una feria. El proyecto, que cuenta con un mínimo de 135 mil metros cuadrados, propiedad de la desarrolladora GICSA, se encuentra en la autopista México-Puebla y fue el primero de su tipo en el país. Además de las tiendas de marcas de lujo, el área de comida y las áreas verdes, Explanada cuenta con una arena para realizar eventos masivos, una pista de hielo, go-karts, cine y un supermercado. La característica particular del proyecto es su polivalencia.
2. Frontón México, CDMX
El proyecto de Frontón México implicó el rescate de un edificio histórico localizado frente al Monumento a la Revolución, por lo que el estudio trabajó de la mano con el Instituto Nacional de Bellas Artes en la restauración. El Frontón es un edificio art decó construido en 1929, la época posterior a la revolución mexicana. Se rehabilitó como un espacio de usos mixtos: en el que se pueden realizar conciertos, pasarelas o ferias, además de los partidos. Actualmente cuenta con un área de casino, restaurante y sky lounge, también tiene proyectado un hotel cuya obra aún no se concreta. Está habilitado para recibir hasta 4,200 espectadores. Lo más emblemático de este proyecto es el cuidado puesto en la restauración de su fachada original, que en la renovación pasó a ser de un tono rojo.
3. Auditorio Telmex
Auditorio Telmex está localizado en el área metropolitana de Guadalajara y se trata de un proyecto elaborado a solicitud de la Universidad de Guadalajara, cuya planificación urbana tomó en cuenta el espacio hoy conocido como Conjunto Santander de Artes Escénicas, su finalidad fue impulsar la vida cultural de la ciudad y de los universitarios. Con un aforo para poco más de 9 mil personas, el Auditorio Telmex es uno de los espacios para espectáculos más importantes de Latinoamérica, esto contribuyó a descentralizar la concurrencia de los eventos en la región centro del país, y le brindó a la ciudad de Guadalajara la posibilidad de una vida cultural aún más enriquecedora. Lo más especial de este proyecto es su participación en la planificación urbana, como parte de un conjunto de espacios pensados para la vida cultural, y como tal, se trata de un edificio dinámico, uno de los rasgos que comparte la arquitectura de Moyao.
4. Centro Cultural Mexiquense de Oriente (CCMO)
Entre todos los increíbles proyectos de Moyao, el Centro Cultural Mexiquense de Oriente es uno de los más significativos para el arte, la cultura y la historia de México. El proyecto es un gran parque público de 17 héctareas que comprende un auditorio y sala de conciertos, una biblioteca y conjunto museístico, y espacios para talleres, además de un teatro al aire libre, la administración y tres plazas que forman parte del espacio abierto. El diseño de la obra está inspirado en el legado del artista plástico Gunther Gerzso y en la estética de los campos agrícolas con sus texturas y colores que abarcan todas las gamas de verdes y ocres. En este proyecto en particular se puede apreciar un juego de sombras creado a partir de la volumetría. Y, aunque todas estas características lo hacen en sí mismo un proyecto extraordinario, el CCMO es además un lugar icónico por nada menos que su vista sureste que da hacia el Popocatépetl y el Iztaccihuatl.
