Otra edición más de Art Basel ha concluido exitosamente el 17 de junio en Suiza. Pero la celebración del arte contemporáneo de élite no sólo se limitó a las imponentes paredes del Messeplatz; fuera del edificio se llevó a cabo la instalación de Basilea, Otra edición más de Art Basel ha concluido exitosamente el 17 de junio en Suiza. Pero la celebración del arte contemporáneo de élite no sólo se limitó a las imponentes paredes del Messeplatz; fuera del edificio se llevó a cabo la instalación de Basilea, una obra que explora los papeles de la sociedad en la urbanística, y de la cual México Design te contará a continuación.
Basilea surge como un proyecto comisionado por Art Basel a Creative Time, organización de arte público sin fines de lucro con base en Nueva York. La concepción y diseño de éste corrió a cargo de la colaboración entre las artistas Lara Almarcegui, Isabel Lewis, y Recetas Urbanas, el colectivo sevillano de arquitectura dirigido por Santiago Cirugeda. La curaduría, por su parte, fue a cuenta de Elvira Dyangani Ose, curadora en jefe de Creative Time.
El proyecto apunta a crear conciencia del rol activo que nosotros, como ciudadanía desempeñamos al ejercer nuestro derecho de intervenir o alterar cualquier ambiente urbano. Además de tratarse de una estructura construida colectivamente, a gran escala, el proyecto incluyó una serie de talleres, eventos y sesiones guiadas desde su apertura al público el 23 de mayo, hasta el final de Art Basel el 17 de junio.
El colectivo Recetas Urbanas, dirigido por el arquitecto Santiago Cirugeda, trabajó de la mano con voluntarios locales e internacionales para diseñar y construir una estructura multi-propósito de carácter civil, usando sólo materiales de origen local y de segunda mano. Los participantes de esta obra aprendieron y enseñaron a otros al mismo tiempo, todo mediante el intercambio grupal de ideas y la colaboración. Mientras duró su construcción hasta llegar a su conclusión, la estructura quedó abierta al público y la zona fue activada con el desarrollo de conversaciones, discusiones y talleres programados.
La buena noticia es que no será la última vez que veamos el fruto de este performance arquitectónico, puesto que la estructura será relocalizada y donada a alguna de las organizaciones locales que participaron en su construcción; de esta forma, Basilea extiende su poder de significación y utilidad para la posteridad, incluso ahora que la edición número 48 de Art Basel llegó a su fin.
Texto: Kevin Cárdenas
Fotografías: © Art Basel and Creative Time