Para cada entorno existe una forma de trabajar distinta, ya que unos son más complicados que otros a la hora de construir. En el caso de entornos áridos, los grandes retos arquitectónicos en el desierto son los que trataremos a continuación.
Teniendo en cuenta las condiciones climáticas, de terreno y de recursos disponibles se tiene claro que en el desierto no suele ser muy sencillo construir proyectos arquitectónicos. Sin embargo, en esta profesión, el cielo es el límite.
La mano de obra
Uno de los retos de arquitectura en los lugares desérticos es la mano de obra y no solo por su capacitación sino por las condiciones adversas que tengan y que por tanto les dificulte realizar su trabajo de forma eficaz, ya que en un ambiente con altas temperaturas es complicado trabajar con poca hidratación.
Contratar personal debe ser un reto para el arquitecto pues se deben exigir mayores aptitudes para el trabajo, así como un mayor coste por cada trabajador de la obra al ofrecerles un pago que consideren justo para las condiciones laborales.
Los materiales
Otro punto importante a tener en cuenta a la hora de construir una obra arquitectónica en este tipo de lugares son los materiales a utilizar, algunos son más duros que terceros así como unos no transmiten tanto calor dentro de la estructura.
Así como de materiales se trata, dependiendo de la ubicación de la construcción está también el costo de transporte de esos materiales si es en un área lejana. La ubicación de la obra es un punto clave para determinar los gastos de transporte.
Los cimientos
Aunque no sea un tema complicado, para muchos arquitectos el estudio del suelo es lo básico para comenzar a edificar sus estructuras. En el asunto de un contexto de desierto, el terreno predominante es el arenoso, por lo que es necesaria una excavación significativa para colocar buenos cimientos estables que soporten la obra.
Texto: Luis Enrique