Para conmemorar el 70 aniversario de la marca de mobiliario Abe Kogyo, el reconocido estudio japonés de arquitectura Nendo se dio a la tarea de diseñar “Seven Doors”, una colección de puertas que parten de un mismo diseño básico, añadiendo a cada una de ellas un sello distintivo e incluso performático.
Lamp, una de las puertas de la colección, incorpora un accesorio de iluminación que la dota de una calidez especial. Kumiko, por su parte, está inspirada en las puertas de los tradicionales tatami japoneses. Baby es una puerta que se ajusta al tamaño de niños pequeños, y la idea surgió gracias a que Abe Kogyo se encarga también del diseño de guarderías y centros de educación infantil. Slide, al igual que una persiana, está diseñada para crear pequeños espacios que permiten el paso de la luz y en ocasiones de oscuridad, lo que pudiera hacernos pensar en el cine negro gracias al juego de sombras y luces que genera. Hang, la quinta puerta diseñada, permite al usuario conectar varios accesorios a la puerta gracias a una hoja de imán colocada en el interior.
En cuanto a la integración de la puerta como elemento decorativo en una estancia, Wall es el mejor ejemplo, ya que gracias a la aplicación de estantes y cuadros se convierte en una pieza de arte-objeto que homenajea a esa zona neutral de la casa, ese espacio de transición, esa frontera y puente del hogar.
Una oda al Op Art y el juego visual aparece con Corner, que además de permitir al usuario entrar y salir a través de las esquinas de una habitación, transforma la manera como entendemos el diseño de interiores, ya que facilita el acceso en silla de ruedas, haciéndolo más práctico y cómodo.
Nendo no deja de sorprendernos con su estilo limpio y a la vez fantástico para crear en torno a un objeto cotidiano.
Texto: México Design