Desde hace nueve años, Oxígeno Arquitectura ha crecido exponencialmente al consolidar proyectos diferenciados entre sí y con un lenguaje de diseño ideado para prevalecer en la utopía de la ciudad perfecta. Jorge González —uno de sus fundadores, junto con Grissel Orozco y Jorge Armendáriz— nos comparte un proceso arquitectónico que podría ligarse al respirar: investigan —aspiran— a fondo las necesidades del cliente y el contexto y, luego de una combustión interna, surgen los conceptos que guiarán su creatividad.
Jorge, en tu cuenta de Twitter compartiste que “La iluminación es el principio básico de todo diseño arquitectónico”…
La luz es el material universal de construcción, el material insustituible.
También consideran primordiales los ambientes acústicos ¿qué experiencias buscan convocar a través de ellos?
Dependiendo del uso que se vaya a hacer del espacio, se determinan sus cualidades acústicas idóneas. Por ejemplo, al interior de una sala de reuniones la voz de los asistentes debe ser inteligible, incluso para quienes estén participando a través de tele o video conferencias, mientras que al exterior no se debe escuchar lo que ocurre dentro.
¿Integran algún otro sentido en la vivencia del espacio?
El tacto juega un papel fundamental en la apreciación de los espacios; las cualidades táctiles de los diferentes objetos y materiales de los que nos valemos son siempre un punto a considerar en nuestro proceso de diseño.
¿Consideran factible integrar tecnología y sustentabilidad?
En la medida que nuestro producto tecnológico replique al producto natural y pase a formar parte de los ciclos vitales de cada ecosistema, sin afectarlo negativamente, tendremos una integración sustentable. En la actualidad nos encontramos en un periodo de transición.
Sin duda, logran que sus diseños prevalezcan en un contexto urbano que idolatra lo efímero…
Tratamos de que nuestros diseños tengan los atributos de utilidad y pertinencia. Un espacio útil puede ser re-inventado y re-significado, y por ello aspirar a prevalecer. Conceptualizamos nuestros diseños para que los espacios sean los posibilitadores de la actividad de nuestros clientes.
¿Qué función cumplen respecto al individuo cuando diseñan un espacio corporativo?
Para el individuo, el espacio corporativo es lo que no se puede encontrar en el afuera: ciertas herramientas tecnológicas, sistemas de apoyo… pero de manera más importante y cada vez con mayor frecuencia, el contacto humano.
¿Cómo diversificar la funcionalidad de un espacio público para atender las necesidades de los habitantes contemporáneos?
Antes que cualquier otra consideración, el espacio público debe ser un sitio donde quieran estar, debe atraer a la gente. Demasiados espacios públicos se encuentran abandonados, en desuso.
¿Cómo sería la ciudad perfecta?
La ciudad ideal es sustentable, enriquece la vida del individuo y satisface sus necesidades sociales.
Lee la entrevista completa en nuestro anuario Elementales.
Entrevista: Carlos Vicente Castro
Fotos: Oxígeno Arquitectura