Las antiguas casas en Las Lomas ya no son suficientes para solventar las necesidades de crecimiento e infraestructura que requieren las pequeñas empresas de alto nivel. Bajo este contexto surge Qúbica Lomas, ubicado en la intersección de las calles Volcán, Montes Urales y Arboledas, en una de las zonas más cotizadas para los corporativos en la Ciudad de México.
El edificio, realizado en 2017 para Grupo KC, fue construido por la firma Colonnier Arquitectos, caracterizada por promover el trabajo en equipos horizontales y privilegiar la colaboración y la crítica en el desarrollo de sus proyectos.
El concepto de Qúbica Lomas se moldea desde un bloque rectangular de piedra y cristal negro, que se relaciona con la obsidiana, material básico para las artesanías mexicanas. En adición, los recortes asimétricos funcionan como cambios de escala, a partir de los cuales se generan terrazas privadas y semipúblicas, que en conjunto, combinan perfectamente en el ambiente residencial que circunda la zona.
La paleta monocromática y elegante también toma posesión de los interiores, lo que trae como resultado un acierto de formalidad, además de acentuar la presencia de la vegetación existente. Los pisos están planteados en un tipo regular con un núcleo de servicios central. La terrazas otorgan la posibilidad de salir y disfrutar de las vistas y ambientes exteriores para quienes regentan la construcción.
Qúbica Lomas no se alza como un edificio aislado: la planta baja y los jardines ingleses que circundan la propiedad permiten una gran interacción comercial a nivel peatonal. Las terrazas y los patios que se forman aquí son extensiones de las áreas interiores, creando así una relación dinámica entre el edificio y su contexto. En resumen, Qúbica Lomas busca mejorar la calidad de los ambientes de trabajo para quienes se desempeñan en ellos.
Texto: Yaheli Hernández
Fotos: Agustín Garza, cortesía de Colonnier Arquitectos