Okio Boutique, espontánea y divertida

Cuando uno visita el sitio web de Taller Ken saltan vivos colores, formas geométricas y juegos tipográficos en el espacio blanco que domina la pantalla. La expresión de Inés Guzmán Méndez y Gregory Kahn Melitonov es espontánea y divertida. Esas mismas singularidades son las que han hecho destacar a esta firma de origen guatemalteco y neoyorkino a nivel internacional.

Uno de sus más recientes trabajos, una óptica situada en el centro de Guatemala llamada Okio Boutique, es una gran muestra de por qué esta compañía ganó el New Practices New York Award 2016. Con una fachada que recibe a sus visitantes por unos enormes lentes de ojo de gato cuya transparencia facilita la visibilidad y el flujo luminoso, Okio deja en claro la frescura de su propuesta desde la primera mirada.

Bajo la premisa de un diseño con relevancia social y cultural en el cual se enmarcan las creaciones de Taller Ken, Okio luce detalles de madera y bambú, que en conjunto con una paleta de tonos verdes propician un ambiente orgánico. Las plantas al interior del inmueble, las paredes blancas, los espejos y una claraboya al centro del techo delatan a la luz como uno de los protagonistas.

 

Desde su fundación en 2013, Taller Ken se ha consolidado como una firma arquitectónica vivaz e innovadora por su disrupción estética y funcional, capaz de apoderarse sin miedo de los espacios en blanco y habitarlos con su geometría, colores, texturas y juegos.

Texto: Mónica Hernández

Imágenes: ©Taller Ken

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