Taller Mauricio Rocha + Gabriela Carrillo

La preexistencia arquitectónica

Iniciado por Mauricio Rocha a partir de 1998 y con sede en la Ciudad de México, Taller Mauricio Rocha + Gabriela Carrillo se constituyó como tal a partir de 2012, al sumarse Gabriela como socia. Ambos son egresados de la Universidad Autónoma de México. Su trabajo, además de haber merecido reconocimiento en diferentes bienales de arquitectura, ha sido publicado y expuesto tanto a nivel nacional como internacional.

En el quehacer arquitectónico ¿qué tan importante consideran la aplicación de la teoría?

 MR Creo fundamental que como arquitectos estemos todo el tiempo construyéndonos a partir de lecturas, pensamientos y acercamientos a las ideas, no solamente a aquellas que tienen que ver con la construcción de la ciudad o de un edificio, o con el tiempo y el espacio en la experiencia proyectual arquitectónica, también a las que se relacionan con una visión mucho más amplia, la vida misma y una manera de entender el mundo y la época en que vivimos. En los proyectos hay intuición: se hacen alusiones a lo que en el momento hacemos. La relación profesional que tenemos Gabriela y yo está esencialmente ahí, en el lugar donde podemos discutir y reflexionar el problema original de la propuesta, hablar de cosas que nos sigan construyendo y, finalmente, construir pensamiento con lo que estamos trabajando.

GC Nos enriquecemos de muchos lugares y de distintas formas, lo que nos parece fundamental. Sin embargo, también nos hemos concentrado en una cotidianidad: la construcción de atmósferas y la transformación en el tiempo. Cada vez creemos más en las oportunidades de hacer arquitectura contemporánea desde un escenario programático, diverso y mucho más complejo, que en solamente concentrarnos en la edificación de muros; creemos en cómo ese espacio se construye, pero no solo debido al tiempo en que el personaje lo habita y lo transcurre, también por cómo el tiempo transforma esa pieza arquitectónica a lo largo del día.

¿Cómo han evolucionado sus proyectos con la ideología del Star System? ¿Qué consideraciones estéticas prevalecen, pese a las modas?

MR Esto se puede volver tema de moda. En alguna época nuestra arquitectura se vinculó con el arte contemporáneo, lo social o lo sustentable. Hemos tenido suerte de que la moda estuviera cerca de cosas que nos interesan, sin embargo, hay que ser cuidadosos. En nosotros existe una fijación muy fuerte en cuanto a la “preexistencia”, que no solo es ese lugar que las instituciones catalogan como algo importante a conservar, sino que también se entiende como una grieta o accidente en el camino o en el terreno. Ahora está de moda la arquitectura social. Perdón, pero uno debería estar siempre preocupado por una arquitectura así: si funciona o está de moda, bienvenida. Pero hay que re-entender el arte para hacer una buena arquitectura, que nazca de una postura respecto a la temporalidad, que trascienda las épocas y, por tanto, las modas.

Mauricio, has afirmado que “la mejor arquitectura es la que corre el riesgo de pasar desapercibida”…

MR Algo que repetimos en pláticas o entrevistas es, efectivamente, el riesgo de hacer una arquitectura que pase desapercibida. Aquí tenemos que citar la idea de Carlos Mijares en Tránsitos y demoras, de que lo importante está en la construcción de experiencias y que dentro de esta conexión hay que complejizar y utilizar el lenguaje contemporáneo que propone una arquitectura digna y contundente. Y repito: la contundencia no está en la forma, más bien está en la complejidad, en el tránsito de leer la obra y entenderla, en esa conexión de contrastes entre lo preexistente y los nuevos elementos que planteamos.

 

El concepto de lo preexistente es muy importante en su quehacer arquitectónico.

MR Sin duda ha sido muy importante. El uso de materiales de contextos cercanos es un pretexto para seguir pensando en recodificar sistemas constructivos, para lo que obviamente se requiere más oficio. Admiro mucho el trabajo de Louis Kahn: cada obra hasta el último momento fue más fuerte y más contundente, trabajaba con un gran oficio sobre esto que es intangible.

GC Ahora que hicimos el pabellón para Hermès, me pregunto dónde está lo efímero y dónde lo temporal. Justamente en este tipo de escenarios te das cuenta de cómo un sinnúmero de estos pabellones que se desarrollan son verdaderamente figurativos y al mismo tiempo desastrosos. Es decir, a nivel de fotografía aparentan ser muy poderosos, lo cual no está mal, porque yo coincido que nuestro trabajo tiene que desaparecer, pero lo poderoso se construye a partir de esas emociones o de ese silencio, de ese impacto, de esa provocación.

Artículo incluido en nuestro anuario Elementales.

Entrevista: Ulises Sánchez Barragán

Imágenes:Taller Mauricio Rocha + Gabriela Carrillo

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